Frente a políticas ambientales regresivas, la ley
de Economía Circular es un avance: Clemente Castañeda
● La economía circular permitirá minimizar la extracción de recursos naturales, la generación de residuos contaminantes, las emisiones de Gases de Efecto Invernadero, e impulsará la generación de empleos.
● “Todo esto resulta crucial para evitar que las posturas ideológicas y de corto plazo, como las que lamentablemente imperan en el actual gobierno, se apoderen de nuestro futuro”, dijo el legislador.
La Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos y la Ley General de Economía Circular, aprobadas esta tarde por unanimidad en el Senado de la República, son legislaciones de avanzada y cruciales para evitar que las posturas ideológicas regresivas e irresponsables en materia ambiental del actual Gobierno Federal se apoderen del futuro de México, expresó el Senador integrante de la Bancada Naranja, Clemente Castañeda.
En tribuna, el legislador por Jalisco dijo que Movimiento Ciudadano hace votos para que estas nuevas legislaciones se consoliden como un instrumento de desarrollo sostenible eficaz y con visión de largo plazo que reduzca los efectos negativos en el medio ambiente, y que atienda la emergencia climática con justicia social e innovación.
Castañeda destacó que se abre paso a una política de Estado en materia de uso eficiente de los recursos, de protección al medio ambiente, y de fomento al crecimiento económico y a la innovación. “Todo esto resulta crucial para evitar que las posturas ideológicas y de corto plazo, como las que lamentablemente imperan en el actual gobierno, se apoderen de nuestro futuro”.
¿Por qué es tan importante esta ley? En México se producen 44 millones de toneladas de basura al año, pero sólo se recicla menos del 10 por ciento. "La economía circular contribuirá a romper estos patrones insostenibles de producción y generación de basura. La reducción, la reutilización y el reciclaje serán los caminos para el manejo y aprovechamiento equilibrado de los recursos, y por lo tanto para disminuir la huella de carbono en nuestro país", explicó.
"Transitar hacia una economía circular podría reducir de manera sustancial los residuos industriales y sus emisiones en algunos sectores, como los de minerales y metales, plásticos, textiles, entre otros más. Además, permitirá minimizar la extracción de recursos naturales, la generación de residuos contaminantes, el consumo de energía y las emisiones de Gases de Efecto Invernadero, sin contar otros beneficios económicos y sociales, como el impulso a nuevas industrias, a la innovación, a la competitividad y, por lo tanto, a la generación de empleos".
La nueva Ley General de Economía Circular promueve que:
- Los productos y materiales permanezcan en uso a través del rediseño de los mismos;
- Impulsa una política de cero residuos enfocada a promover la valorización y aprovechamiento de los residuos;
- Establece la obligación de contar con un Plan de Economía Circular para productores y comercializadores;
- Plantea un plan de manejo para aparatos eléctricos;
- Promueve el consumo responsable, el ciclo de vida de los productos, la concientización, y el valor del trabajo de los grupos informales de personas acopiadoras, entre otras.
El senador Clemente Castañeda recordó que desde hace cinco años, Movimiento Ciudadano, de la mano de la senadora Verónica Delgadillo, impulsa la agenda por un “México Libre de Plásticos”. Reconoció a las comisiones dictaminadoras, a las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado, cuyas voces, dijo, hicieron posible una legislación que, aunque es perfectible, se puede considerar de avanzada para nuestro país.
En tanto, las reformas a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos introducen el principio de economía circular; establecen disposiciones para regular los residuos urbanos sólidos bajo un modelo de economía circular, incluyendo plásticos; prohíbe los plásticos de un solo uso con excepción de los de uso médico, cosmético e higiene; promueve la prevención, reducción del uso y consumo de los plásticos así como su rediseño, óptima recuperación, reciclaje y reintegración a una cadena de valor; prohíbe la disposición de residuos plásticos, su incineración, termovalorización o co-procesamiento si son susceptibles de ser reciclados o reutilizados, entre otras medidas.
Este último dictamen contiene cinco iniciativas presentadas por la Bancada Naranja en el Senado de la República durante la pasada Legislatura.